Cuéntame un cuento.

Blonde contrast by Marrakesh © From Deviantart

Karma,con su pelo azulado y sus ojos enormes y pardos,prestaba toda la atención que podía a Domino,mientras ella contaba su historia.

(Digo que prestaba toda la atención que podía porque esta chica era bastante despistada,y con cualquier tontería se distraía...el vuelo de una mariposa,una nube extraña...)

-Bueno,la verdad esque yo no soy de aquí.Realmente soy de un pequeño pueblo cercano,¿sabes?.Vivía con mi familia,al menos con una parte de ella.Pero de veras,me sentía tan extraña,tan sola.Probé varios lugares,intentaba encontrar un sitio donde sentirme bien,feliz...sin tantos quebraderos de cabeza...Pero nada ha salido bien.Supongo que en un arrebato dije adiós a todo el mundo que tenía y empecé a dejarme llevar...a vagar pensando,hasta que me encontraste...

Domino agachó la cabeza y Karma,mirando fijamente el remolino que formaba el café en la taza,(pues esta chica no solía mirar a los ojos cuando hablaba,tan sólo cuando le hablaban a ella),dió un sorbo y le clavó sus pupilas.

-Quieres decir que ya no tienes a donde ir...O al menos no sabes a donde...Imagino que no quieres retroceder,que no quieres volver...sería dar pasos atrás. -Sí...podría decirse así.Bueno,tú eres la única persona a la que le cuento esto y aún no sé quién eres...supongo que cuando acabe esta conversación extraña cada una irá por su camino.

Domino miró por la ventana con melancolía.

-Hum...Normalmente las historias más extrañas son las mejores,porque nunca vuelven a repetirse...Y con respecto a mí...Bueno,es evidente que yo no soy de aquí.Ni tan siquiera de algún lugar cercano,pero eso es algo sin importancia...Me conocerás mucho más por lo que veas en mí,que por lo que yo te cuente...¿Quieres dar un paseo?.

Las dos chicas salieron del café y dieron un paseo por el centro de la ciudad.La nieve había cesado pero las luces,brillantes y persistentes,seguían iluminando el cielo.Karma miraba de reojo a toda persona que le pareciese curiosa,mientras Domino la observaba con la cabeza gacha.Le hacía gracia esa chiquilla tan rara.

Se hizo de noche,la gente empezaba a disiparse y era hora de volver a casa.La chica de pelo rojo estaba cada vez más triste.Entonces,la señorita de azul se giró hacia ella.La miró a los ojos,sonrió y le dijo:

-Oye...¿Y si vienes conmigo?