jueves, 8 de octubre de 2009

Ley de vida.

The artist by Captain Laserpants © From Deviantart (I love this boy)


Suena a distancias intangibles.
Las notas suben por la columna vertebral y llegan al oído como un susurro estremecedor.
Él no toca el violoncello,él lo siente,lo acaricia,le hace el amor en cada pieza que saca de él.
Es como una mujer,o incluso más perfecto aún.Sus curvas son una perdición.
Suena tan bien,le hace sentir tan maravillosamente feliz...
Es lo único que puede sacar su verdadera esencia,sin aditivos.

Está sentado en una silla alta,de madera.
Abrazado al violoncello,sublime e imponente como un emperador en su trono.
Los ojos cerrados.Mechones de pelo caen por delante de su cara y el resto,hace cosquillas en su espalda.La piel blanca se confunde con la madera perfecta del instrumento.
Y no deja de sonar ni un sólo instante...en cada silencio deseas que continúe,que jamás se detenga ese concierto improvisado en la sombra de una tarde de invierno escandinavo...

Pasan las horas y el cellista se levanta de su trono.
Echa un último vistazo a su gran amante sonoro y le dedica una sonrisa de satisfacción.
Avanza por el pasillo con los pies descalzos,la tarima ni siquiera cruje a su paso,es como un ángel,no camina,flota a ras del suelo en cada pisada.Entra en el baño.
Abre el armario pequeño y saca un pequeño bote marrón translúcido con la tapa blanca.
Lo observa detenidamente.Se mira al espejo.Pasa unos minutos examinando la cicatriz de su pecho,coloca la mano sobre ella.Respira profundamente.

Abre el bote de pastillas.Se toma una.Agacha la cabeza y bebe agua directamente del grifo para que al tragarla sea menos molesto...o menos doloroso.Levanta la cabeza y vuelve a posar sus ojos sobre el espejo.Blanco como el mármol.Ojos oscuros,grandes y profundos,llenos de lágrimas amargas de rabia e impotencia.Aprieta fuertemente el bote de pastillas,como queriendo romperlo en mil pedazos.Un par de lágrimas escapan de lo más hondo de su ser.Un par,una por cada ojo,ni una más,ni una menos.

-Vosotras no me hacéis seguir viviendo,hijas de puta...vosotras no.


Kaleb Van Dijk, 25 años.
Enfermo del corazón.

1 comentario:

¿Has sonreído al leer este cuento? :)